Y este cuento se acabó

Willy Toledo la lía en Twitter despotricando contra PODEMOS. ¡Cuántas cosas se pueden decir en tan pocas palabras! Ahora parece que al "guerrillero" tampoco le gusta ya la original agrupación de Pablo Iglesias que, al percatarse del tirón electoral que su partido está teniendo, está empezando a suavizar sus vínculos radicales y sus simpatías con el terrorismo y determinados movimientos de izquierda extrema.

Al gusto del filo-castrista, PODEMOS se está demorando en sacar los fusiles y comenzar la "limpieza" regenerativa de la venidera República. Demasiada charla, demasiada democracia, demasiada ambigüedad...y es que ya sabemos que Willy es muy exquisito a la hora de elegir con quien juntarse. Casi diría que cualquier día terminará por abandonarse a sí mismo por ser demasiado "moderado".

En cualquier caso, tampoco han faltado respuestas desde la agrupación socialista, criticando a Toledo por bajarse del barco. En fin, como siempre, qué gusto me da cuando veo a estos nuevos políticos devorándose unos a otros cual Saturno, y es que para los de abajo -de verdad- siempre es más interesante tener a unos políticos más preocupados en matarse unos a otros que en meternos la mano en la cartera.

Hay que reconocerlo, Iglesias ha pasado de ser un mero mesias de mercadillo a consagrada estrella del Rock, con sus múltiples y estelares apariciones en todo tipo de programas de máxima audiencia. Sus intervenciones generan grandes dividendos y arrastran avalanchas de cegados votantes a las filas de PODEMOS, algo demasiado ácido para el debilitado estómago de Willy, que es más de andar por la clandestinidad.

Si por Willy fuera, la Castellana se convertiría en una improvisada exposición de bustos sangrantes, acusados de deslealtad a la Revolución y alta traición al pueblo. Eso sí es más de Willy; menos samba e más travalhar, menos palabras y más fusilar.
En fin, veremos en qué queda este lío entre "Kamaradas" y si su desenlace no es similar al de Stalin-Trotsky.

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